Un hombre de 85 años se hartó de que desapareciera dinero, vino y hasta salamines de su casa en un country en Santa Fe e instaló cámaras de seguridad.
Quien le robaba resultó ser un empresario millonario, vecino suyo.
Un hombre de 85 años se hartó de que desapareciera dinero, vino y hasta salamines de su casa en un country en Santa Fe e instaló cámaras de seguridad.
Quien le robaba resultó ser un empresario millonario, vecino suyo.